LA
ESQUINA: CAMBIO
DE REGIMEN.
Amigos:
“ El que quiera ser águila que vuele, el que quiera ser gusano, que se
arrastre, pero que no grite cuando lo pisen”. (Anónimo). Cuando la injusticia se vuelve Ley, la
Rebelión se vuelve deber”. (Thomas Jefferson). Durante estas dos últimas
semanas, estamos viviendo unos acontecimientos, que llevan a la población a
pensar, que en este país está,
ocurriendo algo insólito y verdaderamente preocupante o que nos ha
mirado el tuerto de turno. Un servidor de ustedes, mas bien esta por la primera
opción. Está ocurriendo algo. Insólito y verdaderamente preocupante y obsceno.
Lo de las Tarjetas Opacas de Caja Madrid. y Bankia, esos 83 personajes
obscenos, se han estado riendo de todos los ciudadanos de este país, durante
los últimos 10 años, cuando, primero, mientras estos personajetes, vivian, la
de Dios en Cristo, a base de grandes comilonas, gastos de super lujo, a todo
nivel, sus mismas entidades, se encargaban de resarcir esos gastos,
desahuciando a miles de familias, dejándolas sin cobijo, y en plena calle, con
la anuencia de jueces, magistrados, y fuerzas represivas que actúan a sueldo, y sin el menor
remordimiento, incluso usando los medios de violentacion física disponibles en
su armería. Me niego absolutamente y con toda mi energía vital, a darles mi
perdón. A ninguno de ellos ni a los unos, por ser su chorizada y por su
obscenidad, y a los otros, por venderse
por cuatro monedas al mejor postor, esto es una traición a la patria, a los
ciudadanos, y llegara el día que estos, se tomen, la verdadera justicia. Que es
la única válida la Justicia Social.
Todo esto huele a podrido, y se impone de inmediato un cambio de
régimen, algo que ya un servidor, lleva años proclamando, antes de ocurrir lo
que ocurre, ahora están los hechos, deleznables y vergonzosos, que todos, sabéis, pero que nadie repudia
abiertamente, como ciudadanos de a pie. Ya es hora, que un nuevo régimen nos
abra unas puertas, desde las que se vea, más luz, mas honestidad, mas
generosidad, y que la igualdad no nos convierta en rebaño como hasta ahora,
sino que nos abra las alas a la libertad individual y colectiva, tan pretendida
y tan buscada y casi nunca encontrada por el ser humano desde que aparecieron
los políticos y sus secuaces. Desechar
esa palabra, y darle otra, servidores de la sociedad. Y la de Policías, y darle
también la misma, servidores de la sociedad. Y no represores, ambos. Estas dos
insignes palabras, desecharlas del diccionario, son antiguas y de una
reputación dudosa y así, entraremos en un nuevo orden, con nuevas ansias enterrando un pasado que de por si no
convendría nunca recordarlo. Puede que esto hiera a más de uno, pero solo que
piensen en sus modos de actuación. Por otra parte, el próximo día hablaremos de
la Sanidad y su gran oportunidad perdida para hacer las cosas como debían
hacerse y no una chapuza intolerable. Un saludo amigos, con su pan se lo coman,
y buen provecho. Saude e Terra. Eduardo JJ Rubianes Calvo.
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